Escaleta hacia el cielo.

Estoy tratando de escribir una historia. Una más. Siguiendo el consejo de Lìdia, me propuse hacer una buena escaleta. Me pareció imprescindible dado que la historia vino como una idea tonta que de pronto explotó en mil tramas, personajes y complicaciones de todo tipo. Cuando me quise dar cuenta tenía una maraña inabarcable de pequeñas ideas relacionadas en la que había que poner orden.

Media papelera más tarde me dí cuenta de que el papel no me bastaba. Busqué ayuda. ¡Google dame argo! Y google me lo dio, pero más de lo mismo: fichas, esquemas, borradores (¿por qué los escritores tendrán la letra tan fea? ¡Algunas de esas páginas no las podría leer ni un farmacéutico! Vaya, que a más de uno le metía yo una docena de cuadernillos rubio por las orejas). Vamos, que parece que todo se resume a trasladar el caos a papel. Google me dijo lo que yo ya sabía: que hay que estructurar la historia en una secuencia de hechos concretos que poder manejar, pero el medio… ¡fichas! ¡Post-it! ¡Papeles sueltos! ¡cartulinas que más que guiones parecen el laberinto que viene en los manteles de papel de los menús infantiles! ¡Y en pleno siglo diecin… !

El caso es que soy informático. Llevo desde finales de los ochenta erradicando esas cosas en las empresas. ¿Es que voy a caer yo, en eso, a mi edad?

Así que he desempolvado mi proyectito de programa para escribir, que ya valía para escribir con todos sus extras, para añadirle mi particular versión de elementos, tramas y hechos que configuran la estructura narrativa de una historia. Y estoy en ello.

Por cierto, por el camino le he echado un vistazo al state of the art del temita este en el software para escritores. Scrivener e yWriter, tampoco he ido más allá. Buenas herramientas, pero por lo que he visto mal usadas. Es como clavar puntillas con una plancha. La gente los utiliza igual que el papel. Es un pasito más, no lo dudo, pero sigue siendo poco más que cambiar el caos de sitio.

Y lo que yo pretendo es domar el caos. Así que ya os contaré si:

• Fracaso.
• Triunfo.
• O lo dejo, como siempre.

De momento, aquí os quedáis con Led Zeppelin, por si tenéis tiempo y buen gusto.